Los desafíos de Togo: origen de la violencia ¿cuáles son las vías para una paz duradera? Lomé, 02 de junio de 2025
Togo, pequeño país de África Occidental, lleva las profundas cicatrices de un poder autoritario que ha pisoteado sistemáticamente los derechos de sus ciudadanos. Desde su independencia, los sucesivos regímenes han perpetuado un ciclo de violencia política, represión e impunidad. Este artículo rastrea los orígenes de los abusos de poder de la familia Gnassingbé y sus colaboradores, y explora las vías para establecer una paz duradera. La génesis de la violencia: un legado histórico.
• La huella colonial y la fractura independentista La colonización alemana y luego francesa (1889-1960) impuso una lógica de división étnica y regional, utilizada para controlar el territorio togolés. El referéndum de 1956, amañado según los nacionalistas, “legitimó” la continuación de la tutela francesa, desencadenando masacres como las de Mango y Pya-Hodo en 1957. Fuentes : https://calenda.org/391606?lang=de y https://bit.ly/3Lt5kYz. El asesinato del primer presidente, Sylvanus Olympio en 1963, orquestado por Emmanuel Bodjollé aunque Eyadéma afirmó más tarde haber fusilado personalmente a Olympio con el apoyo de Francia, selló el advenimiento de una dictadura militar. • La dinastía Gnassingbé: represión e injusticia sistémicas Durante su reinado, Eyadéma (1967-2005) institucionalizó el terror mediante una serie de estrategias despiadadas: partido único (RPT), culto a la personalidad mediante animaciones, etc., y represión de los opositores (ejecución de Tavio Amorin en 1992 y otros). Las elecciones fueron “enmascaradas”, según la oposición.
Cuando el general Gnassingbé Eyadéma murió en febrero, le sucedió su hijo Faure Gnassingbé en circunstancias muy viciadas y controvertidas. Y como el golpe de estado fue su herencia, se saltó la Constitución con el apoyo del ejército, para tener éxito en su golpe de Estado constitucional dos veces en la misma noche. Desde 2005, Faure Gnassingbé ha perpetuado este sistema, este legado de padre a hijo. La elección presidencial se celebró en condiciones turbulentas y controvertidas, lo que provocó masacres sin precedentes en 2005. La violencia resultante de estas elecciones causó “entre 400 y 500 muertos” y miles de personas fueron desplazadas a otros países de la subregión, según el informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que atribuyó “la principal responsabilidad” de esta violencia al poder gobernante. El gobierno togolés no ha hecho pública ninguna cifra oficial, y ha nombrado una comisión nacional de investigación con el encargo de presentar un informe sobre los acontecimientos. Las estimaciones varían de 58 muertos según una asociación próxima al gobierno, a 811 según la oposición. Por otra parte, las elecciones del 4 de marzo de 2010 se desarrollaron en un ambiente tranquilo y sin incidentes importantes. Siguió una campaña electoral libre y tranquila. Por primera vez, los candidatos de los distintos partidos pudieron hacer campaña en todo el país e incluso intercambiaron material electoral (camisetas, bufandas, banderas, etc.) de forma cordial. Los resultados anunciados por la CENI mostraban al presidente saliente como claro vencedor (61%), frente a su oponente del histórico partido de la oposición (34%). Estos resultados fueron inmediatamente impugnados por la oposición. Las elecciones presidenciales del 25 de abril de 2015 se celebraron en un contexto político y socioeconómico tenso. Este contexto se explica por la no aplicación deliberada de las reformas institucionales y constitucionales relativas, entre otras cosas, a la limitación del mandato presidencial a dos mandatos de cinco años y a la elección del Jefe del Estado por un sistema mayoritario a dos vueltas. Las elecciones de 2015 se celebraron en un contexto en el que los actos de violencia se redujeron significativamente. No se registraron muertes como consecuencia de las manifestaciones. Sin embargo, el recuento de votos por parte del gobierno sigue siendo un problema, si no una victoria. Cabe señalar que sin fraude electoral, el régimen de Faure no podría ganar ninguna elección. Como de costumbre, las elecciones presidenciales de 2020 fueron ganadas por Faure Gnassingbé, a lo que siguió una represión de las libertades. Detenciones arbitrarias de opositores (Agbéyomé Kodjo en 2020) y periodistas (Sodji Kouanvi en 2024, condenado a pagar 80 millones de FCFA por sus críticas). Las enmiendas constitucionales para mantenerse en el poder y la creciente militarización son la fuerza del régimen de Faure. A esto se añaden otros males que también constituyen la fuente de la violencia en el país: clientelismo y corrupción (el país ocupa el puesto 130/180 en la clasificación de Transparencia Internacional) • Situación actual El país está cubierto de injusticia por parte de quienes lo dirigen, aunque se supone son elegidos para proteger al pueblo. Y nadie tiene derecho a expresarse en este contexto, la prensa está amordazada, prohibición de asambleas; en otras palabras, te torturan y te impiden gritar. Incluso los sindicatos están cercados. La última huelga de profesores que exigían mejores condiciones de trabajo y de vida no ha pasado desapercibida y es lamentable: algunos profesores en huelga han sido despedidos y cesados, mientras que otros han sido puestos a disposición del servicio público, donde sus competencias quedarán ahogadas. La vida socioeconómica es cada vez más difícil e insoportable, incluso insoportable, pero nadie debería hablar, ¿qué clase de dictadura es ésta? Desde su llegada al poder en 2005, no se ha construido ni un solo hospital. Los centros hospitalarios son más parecidos a centros moritorios. Falta de equipos (escáneres y similares), edificios ruinosos e insalubres locales, etc., nuestros hospitales son bancos de mosquitos. El avanzado deterioro de las infraestructuras sanitarias y, sobre todo, la flagrante falta de equipamiento es una parte visible del fracaso del régimen de Gnassingbé. Casi todos los centros de salud se han convertido en lugares donde va a morir la gente. Incluso los llamados centros de referencia carecen de todo, hasta de jeringuillas. A pesar de las protestas de la población, el gobierno ha permanecido insensible. (Fuente: Le Correcteur 29 de mayo de 2022 Godfrey AKPA)
En muchos servicios de Togo, la insalubridad ya no se puede esconder. Las escuelas son otro ejemplo. Se encuentran en un estado lamentable. Edificios que datan del siglo IV. Y las autoridades educativas no quieren que hablemos de ello. La última vez, un director fue despedido por hablar con los periodistas sobre las instalaciones de su escuela.
La crítica es la mejor manera de mejorar, pero a los togoleses se les impide expresar su opinión. La gestión del país por Faure y sus colaboradores es realmente caótica y al mismo tiempo no se preocupan de pensar en la población que está abandonada a su triste suerte, descuidada y completamente ignorada. Esta situación política, social y económica, ya de por sí perjudicial, acaba de agravarse con la enmienda realizada a última hora del 19 de abril de 2024 por diputados cuyo mandato ya había expirado. El pueblo togolés difícilmente puede estar satisfecho con este comportamiento. En Togo, todas las autoridades, aparte de los grandes sueldos que ganan en esta vida cara donde muchos togoleses no encuentran lo suficiente para comer, siguen teniendo beneficios y todo esto lo paga el contribuyente togolés y eso no les dice nada.
El punto álgido fue la decisión de la Compagnie Energie Electrique du Togo (CEET), que mediante la orden interministerial nº 072/MMRE/MEF/MPDC/MCACL de 24 de marzo de 2025 decidió aumentar las tarifas eléctricas, consideradas demasiado elevadas para la población, cuando las autoridades nunca han pagado una factura de electricidad y son ellas las que consumen mucho más. Esta situación alarmante ha disgustado a todos los togoleses. En este contexto, un famoso artista llamado Aamron, que expresaba su frustración en las redes sociales, fue detenido por hombres con pasamontañas en mayo de 2025 y encarcelado. Esta reacción por parte de las autoridades ha provocado el descontento de todos los sectores sociales hasta el día de hoy. Se ha organizado una manifestación para el 6 de junio, día del cumpleaños del Presidente del Consejo Faure, para pedirle que deje el poder porque todo el mundo está cansado y enfadado. En todos los medios de comunicación nacionales e internacionales, en las redes sociales, en las filas de los partidos políticos, en la Conferencia Episcopal, etc., se corea la frase «Libérer Aamron» («Liberar a Aamron»).
En mayo de 2025, la detención del rapero Aamron por sus críticas al gobierno ilustra la persistencia del terror. Sus vídeos denunciando la “calamitosa gestión” del país condujeron a una detención nocturna, condenada por la Iglesia y la sociedad civil. Todo ello ha creado fracturas sociales, económicas y políticas. El 84% de los togoleses temen represalias si denuncian la corrupción. El informe Afrobarómetro 2024 confirma el empobrecimiento creciente, alimentando la desesperación de los jóvenes. Otra estrategia para amordazar a la población es que el poder utiliza actualmente las “amenazas terroristas” en el norte para justificar el estado de emergencia, al tiempo que desvía fondos de seguridad: 16,5% del presupuesto del Estado se destina al ejército, frente a la media africana del 5%. Fuente: https://inff.org/assets/resource/efd_pnud-togo-dfafinal.pdf Es hora de que los poderes fácticos piensen en promover la paz. Para lograrlo, necesitarán estrategias e iniciativas: En primer lugar, necesitamos alimentar la voluntad y el amor patrióticos. Fortalecer a la sociedad civil y a las mujeres protagonistas de la paz.
El Partido Humanista propone: 1. Campañas contra la violencia de género y el tráfico de armas. 2. Defensa de la inclusión de las mujeres en los procesos de toma de decisiones, a pesar de la “falta de apoyo gubernamental” 3. El Plan de Acción Nacional 1325 (resolución de la ONU Mujeres-Paz-Seguridad) prevé integrar a las mujeres en la mediación, pero carece de presupuesto y claridad. 4. Combatir todas las formas de injusticia y violencia.
Educar y movilizar a los jóvenes La juventud de Togo está siendo reducida a las distracciones, a la bebida y los lugares de diversión. No se dedica tiempo a la reflexión. Así que la tarea del Partido Humanista es concienciarlos y llevarlos al despertar de las conciencias para permitir el desarrollo del país. Esto se hará a través de sesiones de formación y talleres para ayudar a los jóvenes a convertirse en referencias. De este modo, podrá prevenir conflictos. Tiene previsto organizar coloquios con miembros del Gobierno para que puedan ayudar a los jóvenes togoleses a promover el amor y la convivencia para una paz duradera. Se les concederá una financiación inicial para que puedan actuar localmente. Esta iniciativa les permitirá luchar contra el terrorismo en todas sus formas. Estas iniciativas contrarrestan el reclutamiento por parte de grupos extremistas, especialmente en el norte expuesto al terrorismo. Reformas institucionales urgentes 1. Justicia transicional: Crear una comisión independiente para investigar los delitos políticos y económicos (asesinatos, torturas, corrupción, dilapidación, malversación etc.). Esta medida es esencial para generar confianza. 2. Desarme: Aplicar el objetivo del PNA 1325 de “reducir la circulación de armas ligeras “, que hoy no existe. 3. Diálogo nacional: El llamamiento de los obispos en 2025 a un “diálogo sincero” debe incluir la oposición y la diáspora. Togo se encuentra en una encrucijada. Mientras los abusos de poder – una herencia colonial perpetuada por una dinastía autoritaria- han sumido al país en la violencia, la resistencia de la sociedad civil ofrece un rayo de esperanza. La paz llegará a través de : • La protección de denunciantes como Aamron, símbolos de la resistencia ciudadana. • Un mayor apoyo internacional a las iniciativas locales (Partido Humanista, WILPF, PEACE-WAY). • Reforma constitucional que garantice la alternancia en el poder y la independencia judicial. La paz no es una palabra, sino un comportamiento.
Komlan AGBOSSOUMMONDE – miembro pleno de Partido Humanista de Togo
