A pesar de una persistente lluvia, ayer jueves por la tarde distintas organizaciones sociales agrupadas en el Espacio Día a día por Julia Chuñil se manifestaron ante las sedes de cuatro poderes del Estado chileno por su silencio a 6 meses de la desaparición de esta comunera y activista Mapuche desde la comuna de Máfil, en el sur del país. Hasta entonces, Julia -de 72 años- se desempeñaba como presidenta de la Comunidad Putreguel y estaba habitando un terreno de 900 hectáreas de bosque nativo, al cuidado de especies sagradas para el pueblo mapuche. También los medios de comunicación masivos han silenciado este caso. Precisamente por eso quisimos ser parte de esta conovocatoria, como medio alternativo y comunitario.
Esa zona se encuentra en conflicto con la industria forestal que predomina en terrenos que un día fueron propiedad mapuche, y cuyos fines extractivistas han llevado a la pérdida de diversidad (bosques, fauna y flora) por el monocultivo de pino y eucaliptus (ambas maderas exógenas de rápido crecimiento y comercialización). La reciente ampliación de la declaración de zona de emergencia por parte del Estado en la macrozona sur, que criminaliza la organización comunitaria en prevención de actos de “terrorismo” de dudoso origen, ciertamente no alienta la participación ni el diálogo, y beneficia a las forestales y sus manejos.
Con consignas como “¡Que digan, que digan, que digan dónde está: que si fue la policía o si fue la forestal!”, los manifestantes denunciaron la connivencia entre las forestales (y por extensión, las empresas extractivistas que han tenido una casi completa libertad para disponer de los recursos naturales del país) y las autoridades del Estado desde prácticamente los días del régimen militar pinochetista y que los gobiernos socialdemócratas de la Concertación por la Democracia ni hicieron nada por atenuar. Muy por el contrario, según varios colectivos, el acuerdo de la Comisión para la Paz y Entendimiento, que busca abrir un diálogo hacia la solución de este prolongado conflicto y que hace unos días presentó el presidente Boric, es más bien una “farsa” sin representatividad real del pueblo mapuche por la falta de participación territorial.
Ante la CONADI
Ante la CONADI
La Caminata partió puntualmente frente a la CONADI (Corporación Nacional de Desarrollo Indígena), acusando a esta entidad de inacción y opacidad en la compra de terrenos a las forestales y su entrega a las comunidades mapuche. En palabras de la activista Lucía Sepúlveda: “CONADI no ha dicho una palabra, y está involucrada. Es un actor que negó la tierra al pueblo mapucje y se la dio gratis al latifundista Juan Carlos Morstadt, que es el que amenazaba a Julia. Por eso estamos pasando por CONADI para que se haga parte y responda por sus omisiones”.
Después avanzó hacia la sede de la Fiscalía Nacional, por su manejo incoherente (con nombramiento de 4 fiscales a la fecha) y poco pulcro (lo que incluye filtraciones a los medios para perjudicar a la familia Chuñil).
Tras ello, se desplazó hasta la sede de la Corte Suprema y al ex Congreso de la Nación, que quedan frente a frente, para denunciar el silencio judicial y mediático en torno al caso. Lucio Cuenca, director de OLCA (Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales), señaló que “el caso de Julia Chuñil se suma a otros casos no resueltos, como los de Macarena Valdés, Emilia Bau, Pablo Marchant y Camilo Catrillanca, y se agrava con la presencia de ex uniformados en destacamentos privados de empresas forestales que actúan con lógica represiva heredada de la dictadura”.
Frente a Tribunales
Frente a Tribunales
Frente a Tribunales
Por último, terminó en la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de la Moneda (sede del poder ejecutivo), para reclamar que el Estado busque de verdad y sancione a los responsables. En ese lugar, Juana Aguilera, del Comité Ético contra la Tortura dijo por el altavoz que “exigimos a la Fiscalía Nacional que haga una investigación exhaustiva, minuciosa, sin racismos, sin clasismos, para esclarecer de una vez por todas dónde está Julia Chuñil. No puede existir una justicia para pobres y otra justicia para ricos. Julia tenía sus derechos y todos ellos fueron violados”.
Lucio Cuenca y acompañante del OLCA frente a La Moneda
Lienzo principal por la calle Huérfanos
Comisión Ética contra la Tortura frente a La Moneda
Mov contra la Tortura Sebastián Acevedo frente a La Moneda
Fuerza Ecologista Verde frente a La Moneda
También los carnavaleros se manifestaron por Julia Chuñil